Fernando Alonso sorprendió a todos en el día de ayer, cuando confirmó que no disputará el GP de Mónaco para poder correr la Indy 500. Su objetivo, tal y como ha revelado en el día de hoy, no es otro que convertirse en uno de los mejores pilotos de la historia, y para ello solo puede o "conseguir ocho mundiales", algo que por otro lado ve complicado, "o convertirse en un mejor piloto" participando en las grandes pruebas del automovilismo. 

Para Alonso, esta prueba es bonita y la espera con muchas ganas, aunque antes debe terminar los Grandes Premios previos a la prueba Indy 500. "Hubo muchas reacciones positivas por parte de todo el mundo y apoyo máximo de todos mis compañeros. Tengo ganas de vivirla, pero antes tenemos que acabar estas carreras de F1", comentó. 

El mundo actual, tan profesionalizado, obliga a los pilotos a tener que ceñirse a una sola modalidad, algo que chocaba de frente con el sueño de niño que siempre tuvo Fernando. "Nos tenemos que comprometer con una sola categoría. La Indy 500, F1, las 24 Horas de Le Mans son las carreras más grandes del mundo y siempre pensé en competir y participar". 

Avisó a los participantes de que él no va solo a ver como pasan los coches, sino que quiere ganar y dejar su seña de identidad en una prueba de ese calibre. "Quiero disfrutar de la experiencia, por lo que esta es una gran cosa que está sucediendo y nos divertiremos. Por otro lado, un piloto novato en el mismo equipo que estaré yo ganó la Indy 500. Esto es motorsport, cualquier cosa puede suceder. No voy a ir allí sólo para ver los coches dando vueltas, iré con mi mejor y total compromiso para ganar la carrera". 

Por último, quiso confirmar lo que muchos creen. Asegura que se puede adaptar a cualquier modalidad, y que así se verá en la Indy 500. "Me considero un piloto completo que se adapta a cualquier tipo de coche en cualquier condición y la mejor manera de demostrar esto al mundo es competir en diferentes categorías y tratar de ganarlas", sentenció.