Álex Márquez se mostró muy decepcionado por su caída en el Gran Premio de Argentina, que le impidió luchar por la victoria que finalmente fue para su compañero de equipo, el italiano Franco Morbidelli, que amplía su ventaja en el Mundial tras los resultados de sus rivales.

"Es injusto. Hemos estado todos los entrenamientos luchando, hemos sido competitivos en agua, en seco, en semiseco... Me he sentido muy bien y he disfrutado muchísimo, así que ha sido una pena la caída. Aún no entiendo lo que ha pasado porque ha sido muy rara porque había tenido sustos en vueltas anteriores y la moto volvía, pero esta vez alguien ha querido que no volviera y me ha escupido por arriba. Son cosas que pasan. Me quedo con lo positivo"".

El hermano de Marc Márquez, por el contrario, no pierde la confianza de cara a la próxima carrera, que se disputará en el circuito de Austin. Hemos cambiado la moto del 'warm up' a la carrera porque sufríamos mucho e íbamos clavados así que 'chapeau' por el equipo y ahora ya a pensar en Austin y a recuperarme y que no sea nada el dolor en la mano."